martes, abril 10, 2007

Que pena, pero está muy feo

La caja de compensación CAFAM lanzó la semana antepasada el comercial en el que presenta su nueva imagen, siguiendo los pasos de su competencia, Colsubsidio, que ya había estrenado logotipo unos meses atrás.

¿QUIÉN LES DIJO LAS AGENCIAS DE PUBLICIDAD QUE UN LOGO PARA QUE SEA "JOVEN Y FRESCO" DEBE TENER UNA TIPOGRAFÍA ILEGIBLE Y FEA?. No me crean pendejo!, la Futura de la imagen anterior les parecerá una letra anticuadísima y “poco cool” a los chocolocos diseñadores de Emblem, pero es mucho más legible y apropiada para el tipo de institución que están representando que la tipografía escogida, acorde ésta más bien con e
l identificador de la zona de productos en promoción de un supermercado.

No puede uno menos que lamentarse de la pésima imagen lanzada. La de Cafam es otra muestra de esa moda absurda que se está tomando las instituciones colombianas
de cambiar con “imágenes frescas e innovadoras” que no son otra cosa sino metidas de pata, que lucen un desvergonzado maltrato de la tipografía –con unas fuentes bajadas de Internet-, donde se abusa de las texturas y los fondos degradados.

Triste que en el país estamos asistiendo al nacimiento de una seguidilla de mounstretes gráficos –Colombia es pasión, el partido Visionario, Davivienda, el partido de la U, etc.- que parecen no tener detrás de su creación, un poco de criterio serio. Viendo eso se da uno cuenta que el diseño, por lo menos de identidad no importa, finalmente un logo no vende por ser bueno o malo, simplemente si el cliente es lo suficientemente grande para saturar el mercado con una imagen no importa que está sea un gran moco.

Si son malos o buenos productos en su ámbito no es la cuestión en este momento -lo aclaro por aquello de los empleados de Davivienda que me escribieron anteriormente- pero lo cierto es que en nuestro país no importa la calidad de una imagen, aquí la falta de pregnancia se compensa con saturación, el bajo impacto visual con saturación, la pobreza formal con saturación.

Ya veremos la casi efe sonriente de Cafam en publicidad impresa, televisión, Internet, vallas, andenes, paredes, buses y un largo etcétera. Al final no importará lo feo que es simplemente nos acostumbraremos. Como con el logo de transmilenio más o menos…


P.D.
El texto de presentación del nuevo logo de Cafam no podía ser más pretencioso:
"CAFAM, la caja de compensación más grande de Colombia cumple 50 años y una de las maneras de celebrarlo es su nueva imagen. Una imagen fresca, nueva y dinámica. Pero más que ser un cambio de imagen es la imagen de un cambio."

4 comentarios:

Darko dijo...

Huy si Nelson...se tiraron la imagen de Cafam, un diseno que era muy bueno...lo curioso es que en mi opinion no redisenaron nada, solo echaron el anterior al bote de la basura y salieron con esa tonteria de diseno...la f feliz de cafam... que tristeza. Que crimen, no hay derecho!...

lanegret dijo...

...lo que pasa es que como colsubsidio hizo algo inmundo, ellos no se podían quedar atrás. Pero no sé quién gana.

Anónimo dijo...

no me parece el nuevo logo de cafam es fresco y amigable ademas no todos los logotipos tienen que ser masisos y con tipografia vieja osino apple tendria su manzana con colores de bandera gay todavia !

Anónimo dijo...

Hola Nelson: Totalmente de acuerdo. Renovar por renovar no tiene sentido y sí denota un problema de ética profesional muy grande porque es obvio que un muy buen trabajo de lobby les permitió convencer a los directivos de que si no cambiaban la imagen, las otras cajas de compensación les pasarían por encima. Carreta. Solo un pretexto para facturarle quién sabe cuántos millones por ese trabajito extra. Eso es como si un médico se inventara cirugías innecesarias a sus pacientes solo para cobrarle el servicio a las EPS.

El anterior logo de Cafam, como el anterior de Colsubsidio, tenían el acierto de manejar la 'circularidad' (aunque el de Colsubsidio tuviera una geometría triangular) es decir, eran logos cerrados, llenos de sentido porque el significante conducía rápidamente al significado. Pero este de CAfam es aún menos afortunado que el de Colsubsidio quien al menos acudió al tangram como conjunto de sintagmas para recombinar submarcas.

En resumen, el cambio en la identidad de Cafam es bastante mediocre porque acude a texturas anacrónicas y a tipografías infantiles que más se parecen a marcas de ropa juvenil que a una institución que por naturaleza debe inspirar confianza, bienestar, solidez...

Felicitaciones por el análisis que hiciste y por abrir el espacio para que los ciudadanos silvestres podamos opinar. Saludos.